BREVES DE DOSQUEBRADAS

AQUÍ DOSQUEBRADAS

En La Pradera
Completamente deteriorada se encuentra una de las vías principales acceso al barrio La Pradera. La falta de mantenimiento de dos de las losas ubicadas en la carrera 21 con calle 18, pone en apuros a conductores de buses, motos y carros medianos, quienes se ven forzados a esquivar la zona averiada para evitar daños mecánicos, pero al hacer esta acción invaden el carril contrario, aumentando las posibilidades de causar un accidente de transito. Los peatones también se ven afectados, pues en más de una ocasión se han atascado entre las grietas de las placas de cemento. Los vecinos del sector hacen un llamado urgente a las autoridades, para que les sea solucionado lo antes posible dicha problemática.

Sin Niños
Así se encuentra el parque del barrio Rafael García Herreros, ubicado entre las manzanas C y D2 del lugar. Los juegos que hace más de tres años servían para brindar diversión a los habitantes de todas las edades, ya se encuentran totalmente averiados. Los vecinos del sector aseguran que a falta de integrantes que conformen una junta de acción comunal, no pueden luchar por el restablecimiento de algunas de las zonas de mayor afluencia e importancia, que se van deteriorado con gran facilidad al paso del tiempo.

Hueco engañador 
En la carrera 25 sector que conecta a los barrios Girasol, Pablo XI y García Herreros, hay un hueco engañador. Se trata de una cavidad que a causa de los variados cambios climáticos de los últimos días, se llena en su totalidad de agua, ocultando su verdadera profundidad a peatones y conductores de carros, motos y buses. Algunos de los habitantes de la zona aseguran que en lugar ya han ocurrido varios accidentes, pues los transeúntes pisan en falso y terminan lastimados.

Malos olores 
Los habitantes del barrio La Graciela sufren por los malos olores que despide un caño lleno de basura. Algunos vecinos aseguran que desde la fundación de la zona han tenido el mismo problema, y aún no se hace nada por solucionarlo. El mayor agravante yace en la actitud de personas inescrupulosas que en numerosas ocasiones arrojan basuras de todos los tamaños al lugar. Los residentes de las casas aledañas temen que los residuos obstruyan el paso del agua de la cañada, y esta termine causando serios problemas. inundación.

Con información Diario del Otún