Músicos tratados como delincuentes en Ecuador.
Pagaron Dos millones de pesos para salir de la cárcel
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Entre los integrantes de la Banda Musical del Valle del Guamuez, se encuentran José Díaz, Ezequiel Salazar, Wilmer Abasoló, Jhon Albert España, Jefferson Salazar y Kevin Ramírez. |
Un grupo de 15 artistas del Valle del Guamuez, Bajo Putumayo viajaron a la provincia de Orellana para participar en un evento cultural y por no portar la Tarjeta Andina fueron detenidos por 4 días.
“Las autoridades de Ecuador nos trataron como si fuéramos asesinos o ladrones”, señaló el director de la banda musical del Valle del Guamuez, Wilmer Abasoló, quien estuvo retenido en ese país durante 4 días junto a 6 personas más por no portar la Tarjeta Andina.
El director de la agrupación musical afirma que no volverá al vecino país por los maltratos recibidos por parte de la Policía que según él no les importó que su estadía en ese país era solo para participar en un evento cultural que se organizaba en Orellana.
“No fueron suficientes las peticiones que se presentaron a las autoridades de esa
El director de la agrupación musical afirma que no volverá al vecino país por los maltratos recibidos por parte de la Policía que según él no les importó que su estadía en ese país era solo para participar en un evento cultural que se organizaba en Orellana.
“No fueron suficientes las peticiones que se presentaron a las autoridades de esa
provincia por parte de la Alcaldía. Nos trataron como a delincuentes por solo querer dar una muestra de nuestro folklore colombiano”, precisó.
Los hechos ocurrieron el 16 de julio en la ciudad de Sacha, en Orellana cuando los 15 músicos luego de una presentación en el Colegio Santiago de Quito, salieron a pasear por las calles.
La Policía los retuvo y los envió a la cárcel de Coca, una ciudad que queda a media hora de recorrido de Sacha para abrirles un proceso judicial por no portar los documentos que exigen las autoridades de Ecuador para permanecer en este territorio.
La agrupación no solicitó la Tarjeta Andina porque desconocían que para ingresar a Orellana la requerían. Incluso creían que esta provincia hacía parte de Sucumbíos.
Entre los retenidos se encuentran José Díaz, Ezequiel Salazar, Wilmer Abasoló, Jhon Albert España, Jefersson Salazar y Kevin Ramírez.
Estaban invitados
Según el director de la agrupación musical Wilmer Abasoló, las directivas del Colegio Santiago de Quito de la ciudad de Sacha, los invitaron a participar en una ceremonia de graduación de bachilleres.
“Hemos realizado varias presentaciones en el vecino país, especialmente en Sucumbíos y Orellana, pero nunca nos han tratado como a los peores delincuentes”, resaltó.
Abasoló narró que un bus del centro educativo los recogió en el puente internacional de San Miguel para llevarlos hasta Sacha en donde harían su presentación musical.
Dijo que llegaron al colegio y luego de participar del evento salieron a recorrer la ciudad. Fue entonces cuando los abordaron los policías para pedirles los documentos de identificación y al no portar la Tarjeta Andina fueron conducidos a un calabozo.
“Teníamos nuestras cédulas y los menores de edad su tarjeta de identidad. Sin embargo nos subieron a un carro y nos llevaron hasta la ciudad de Coca”, añadió.
Durmieron en el piso
La pesadilla no termina allí. Luego de hacerles una requisa fueron conducidos a una celda de cuatro por tres metros, en donde también se encontraban recluidas 29 personas acusadas de asesinatos y toda clase de hurtos.
Los menores de edad fueron devueltos al país, solo cuando llegaron algunos de sus padres. Los más pequeños no entendían que era lo que pasaba y las razones por las cuales la Policía se llevó a sus compañeros.
“Los seis músicos que nos quedamos, tuvimos que dormir sentados en el piso en medio de todo tipo de delincuentes. Excepto Darwin Yela, quien tiene cédula ecuatoriana y se tuvo que encargar de los trámites de nuestra liberación”, precisó.
La comida que además de ser de mala calidad la sirvieron como si fuera alimento para perros. “No entendemos por qué si nosotros solo íbamos a prestar un servicio a un colegio, nos tratan de esa manera”.
Las noches para estos talentosos profesionales de la música se hicieron eternas. Afirmó que no veían la hora de volver a su tierra y con las ganas de no volver jamás.
Esta amarga experiencia que tuvieron que padecer es el resultado de la discriminación de los ecuatorianos hacia los putumayenses que por vivir en una zona de conflicto y violencia son estigmatizados.
Pagaron $2 millones
Según el integrante de la banda musical del Valle del Guamuez, Darwin Yela, fue necesario pagar dos millones de pesos como fianza para poder sacar de la cárcel a sus compañeros.
“Reunimos entre todos los integrantes el dinero para pagar la fianza y para los honorarios de un abogado que contratamos para la diligencia, porque en Ecuador solo se hacen las audiencias en presencia de un abogado”, explicó.
Sostuvo que siente tristeza por estos hechos de lo cuales fueron víctimas ya que a las autoridades ecuatorianas no le dieron credibilidad a las peticiones del alcalde de este municipio, Leandro Romo.
“Lamentablemente la Policía del vecino país falta a sus leyes y desobedecen a la autoridad máxima que es el presidente Rafael Correa”, agregó.
Sostuvo que lamentablemente muchas más personas se encuentran recluidas por varios días y meses por los mismos hechos, pero como no tienen el dinero tienen que quedarse recluidos en las cárceles de Ecuador.
No sirvió la diplomacia
Una vez las autoridades de Putumayo se enteraron de la retención de los músicos del Valle del Guamuez en Ecuador procedieron a dialogar con el gobierno provincial de Orellana para pedir por su liberación.
El gobernador Byron Viveros envió un documento en el que aclaraba que las personas detenidas eran integrantes de un grupo musical y que acudieron a ese país por invitación de las directivas de un colegio.
El secretario de Cultura Municipal, William Mayoral, viajó hasta la ciudad de Sacha para tramitar la liberación pero no pudo lograrlo porque para este trámite se requería de un abogado y pagar una fianza.
Darwin Yela, indicó que incluso por la intervención de las autoridades de Colombia casi los dejan retenidos una semana más porque actuaron ante el intendente de la provincia de una manera altanera y grosera.
Discriminación
El músico Darwin Yela, manifestó que no solo lamenta lo ocurrido en el vecino país sino también la actitud irresponsable de las autoridades de Putumayo y del Valle del Guamuez.
“Si no hubiese sido por nuestros recursos, nuestros compañeros aún estuvieran en la cárcel. Los gobernantes municipal y departamental no nos brindaron el apoyo que necesitabamos”.
Así concluye esta historia en la que se evidencia no solo la falta de tolerancia sino además la discriminación de un país hacia personas que se destacan como artistas y que pretenden llevar un pedazo de Colombia al exterior.
Los hechos ocurrieron el 16 de julio en la ciudad de Sacha, en Orellana cuando los 15 músicos luego de una presentación en el Colegio Santiago de Quito, salieron a pasear por las calles.
La Policía los retuvo y los envió a la cárcel de Coca, una ciudad que queda a media hora de recorrido de Sacha para abrirles un proceso judicial por no portar los documentos que exigen las autoridades de Ecuador para permanecer en este territorio.
La agrupación no solicitó la Tarjeta Andina porque desconocían que para ingresar a Orellana la requerían. Incluso creían que esta provincia hacía parte de Sucumbíos.
Entre los retenidos se encuentran José Díaz, Ezequiel Salazar, Wilmer Abasoló, Jhon Albert España, Jefersson Salazar y Kevin Ramírez.
Estaban invitados
Según el director de la agrupación musical Wilmer Abasoló, las directivas del Colegio Santiago de Quito de la ciudad de Sacha, los invitaron a participar en una ceremonia de graduación de bachilleres.
“Hemos realizado varias presentaciones en el vecino país, especialmente en Sucumbíos y Orellana, pero nunca nos han tratado como a los peores delincuentes”, resaltó.
Abasoló narró que un bus del centro educativo los recogió en el puente internacional de San Miguel para llevarlos hasta Sacha en donde harían su presentación musical.
Dijo que llegaron al colegio y luego de participar del evento salieron a recorrer la ciudad. Fue entonces cuando los abordaron los policías para pedirles los documentos de identificación y al no portar la Tarjeta Andina fueron conducidos a un calabozo.
“Teníamos nuestras cédulas y los menores de edad su tarjeta de identidad. Sin embargo nos subieron a un carro y nos llevaron hasta la ciudad de Coca”, añadió.
Durmieron en el piso
La pesadilla no termina allí. Luego de hacerles una requisa fueron conducidos a una celda de cuatro por tres metros, en donde también se encontraban recluidas 29 personas acusadas de asesinatos y toda clase de hurtos.
Los menores de edad fueron devueltos al país, solo cuando llegaron algunos de sus padres. Los más pequeños no entendían que era lo que pasaba y las razones por las cuales la Policía se llevó a sus compañeros.
“Los seis músicos que nos quedamos, tuvimos que dormir sentados en el piso en medio de todo tipo de delincuentes. Excepto Darwin Yela, quien tiene cédula ecuatoriana y se tuvo que encargar de los trámites de nuestra liberación”, precisó.
La comida que además de ser de mala calidad la sirvieron como si fuera alimento para perros. “No entendemos por qué si nosotros solo íbamos a prestar un servicio a un colegio, nos tratan de esa manera”.
Las noches para estos talentosos profesionales de la música se hicieron eternas. Afirmó que no veían la hora de volver a su tierra y con las ganas de no volver jamás.
Esta amarga experiencia que tuvieron que padecer es el resultado de la discriminación de los ecuatorianos hacia los putumayenses que por vivir en una zona de conflicto y violencia son estigmatizados.
Pagaron $2 millones
Según el integrante de la banda musical del Valle del Guamuez, Darwin Yela, fue necesario pagar dos millones de pesos como fianza para poder sacar de la cárcel a sus compañeros.
“Reunimos entre todos los integrantes el dinero para pagar la fianza y para los honorarios de un abogado que contratamos para la diligencia, porque en Ecuador solo se hacen las audiencias en presencia de un abogado”, explicó.
Sostuvo que siente tristeza por estos hechos de lo cuales fueron víctimas ya que a las autoridades ecuatorianas no le dieron credibilidad a las peticiones del alcalde de este municipio, Leandro Romo.
“Lamentablemente la Policía del vecino país falta a sus leyes y desobedecen a la autoridad máxima que es el presidente Rafael Correa”, agregó.
Sostuvo que lamentablemente muchas más personas se encuentran recluidas por varios días y meses por los mismos hechos, pero como no tienen el dinero tienen que quedarse recluidos en las cárceles de Ecuador.
No sirvió la diplomacia
Una vez las autoridades de Putumayo se enteraron de la retención de los músicos del Valle del Guamuez en Ecuador procedieron a dialogar con el gobierno provincial de Orellana para pedir por su liberación.
El gobernador Byron Viveros envió un documento en el que aclaraba que las personas detenidas eran integrantes de un grupo musical y que acudieron a ese país por invitación de las directivas de un colegio.
El secretario de Cultura Municipal, William Mayoral, viajó hasta la ciudad de Sacha para tramitar la liberación pero no pudo lograrlo porque para este trámite se requería de un abogado y pagar una fianza.
Darwin Yela, indicó que incluso por la intervención de las autoridades de Colombia casi los dejan retenidos una semana más porque actuaron ante el intendente de la provincia de una manera altanera y grosera.
Discriminación
El músico Darwin Yela, manifestó que no solo lamenta lo ocurrido en el vecino país sino también la actitud irresponsable de las autoridades de Putumayo y del Valle del Guamuez.
“Si no hubiese sido por nuestros recursos, nuestros compañeros aún estuvieran en la cárcel. Los gobernantes municipal y departamental no nos brindaron el apoyo que necesitabamos”.
Así concluye esta historia en la que se evidencia no solo la falta de tolerancia sino además la discriminación de un país hacia personas que se destacan como artistas y que pretenden llevar un pedazo de Colombia al exterior.
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