domingo, 7 de agosto de 2011

REINAS POR ROSCA

Agosto 7, 2011 - 00:13
“A los capos les escanta tener como trofeos a las más deseadas”
Yovanna Guzmán cuenta su historia de amor y dolor con el capo del narcotráfico Wílber Varela, conocido en el mundo de la mafia como ‘Jabón’. El libro que acaba de publicar es hoy de los más vendidos.
EL NUEVO DÍA: Wílber Alirio Varela era uno de los más sanguinarios capos del narcotráfico. 
¿Cómo lo conoció? YOVANNA GUZMÁN: Lo conocí aquí en el Tolima. Yo dirigía el concurso Intermodel y una de las modelos era novia de él. Esa noche de la final, después del evento, me invitaron a irme de rumba con ellos, pero yo estaba con el jurado, con mi grupo y manejaba un certamen importante del que me habían dado la franquicia, entonces les hice el feo y me fui. A partir de ahí comenzó su obsesión por reencontrarme.
 END: ¿Cómo la encontró?
YG: Regresé a Bogotá a mis cosas del modelaje y metida en este medio conocí un personaje muy popular en la farándula. Las apariencias engañan y resultó que era el hijo bobo de Varela, quien le conseguía las mujeres, le hacía las rumbas y terminé yendo sin saber que iba a conocerlo.
 END: ¿Cómo la abordó?
YG: Me dijo que desde que me había visto se había enamorado de mí, que me veía muy linda. Él me conoció trabajando y creo que eso fue de lo que más le gustó. Me dijo que lo que más le encantaba de mí es que era una mujer luchadora, trabajadora y echada p’a lante. Él sabía que conmigo no podía entrar por el lado del dinero y decirme ‘te pago tanto’.
 END: ¿De qué manera la conquistó?
YG: Todo comenzó como una ilusión. Me decía que era ganadero, y con dinero uno se descresta. Yo era una mujer de 20 años, de una familia normal, que me estaba dando lo necesario para la universidad; una niña que estaba empezando sus sueños y cuando llega una persona de estas y te deslumbra con lujos, cualquiera peca con esos detalles.
 
END: ¿Cuándo se enteró de que estaba saliendo con un capo?
YG: Me enteré de que era Varela al año y medio de estar ennoviada con él y cuando ya  no podía salirme. Cuando vi por televisión que lo estaban buscando, le dije que por qué no me había contado, me dijo que no podía estar diciéndoselo a todo el mundo y que todo lo que decían en la prensa no era cierto. Quise apartarme de él, pero nunca lo permitió.
 END: ¿Cómo se lo impidió?
YG: Me perseguía todo el tiempo, me mandaba gente a toda hora para que fuera a hablar con él, me decía que yo no lo podía dejar. Le empecé a tener miedo, pero de cierta forma me sentía agradecida con él.
 END: ¿Cuánto tiempo convivió con Varela?
YG: No viví nunca con él, pero era la mujer. Bueno, una de las tantas que tenía. Al principio nos veíamos cada ocho días, después cada 15 días, luego cada mes, cada dos meses...
  END: ¿Realmente se enamoró de Varela?
YG: : ¡Claro! Me enamoré de él bobamente. Lo quise muchísimo, era super especial conmigo. Una persona como él, que era el patrón de los patrones, se ponía a subirme el desayuno a la cama y me consentía como si fuera una niña. Nadie podía creerlo, decían ‘qué le hace esta mujer a este señor que lo tiene bobo’. Realmente era lelo conmigo, todos los caprichos y lo que yo quería lo conseguía. 
  
END: ¿Que esperaba de esa relación?
YG: Yo soñaba con casarme y pensé que con él de pronto lo iba a lograr. Pero Varela no era un hombre de familia, sino un hombre al que le encantaba gastar su dinero, mandar, hacer su santa voluntad. Enterarme de que un personaje de estos tiene la capacidad de comprarse una modelo en 40 o 50 millones de pesos, o ir a gastar a un casino 100 millones de pesos, me llevaron a decir: ‘¿qué estoy haciendo aquí?, estoy en el lugar equivocado, esta no es la vida que quiero para mí’; pero ya fue imposible después salir de él.
  END: ¿Hubo momentos dolorosos en su relación con Varela? 
YG: Sí, varios momentos muy fuertes. El más duro fue la muerte de un ser que yo amaba, una persona que conocí después de mucho tiempo de ya no querer estar con Varela y él lo mató.
  
END: ¿Fue aquel famoso Chico Med que lo mataron misteriosamente?
YG: Yo conocí a ese personaje y me enamoré perdidamente como cuando una niña sueña que ese es el hombre de su vida, se va a casar y tener hijos, porque él sí era un hombre normal y además me amaba y yo lo amaba. Era un amor puro y Varela lo mató. Fue terrible porque yo viví el momento en que lo mataron, me tocó correr, yo al lado de ocho cadáveres, me metieron presa; fue una cosa que no le sigo contando porque me pongo a llorar otra vez, pero ha sido lo más duro que me tocó vivir con él.
 END: ¿Alguna vez él le hizo daño?
YG: Sí, me enteré cuando él murió. Yo tuve una mala experiencia que todos conocieron cuando me pegaron un tiro en una pierna. Al principio pensé que era un atraco. Cuando casi “lo mataron, me enteré de que no fue un atraco sino que él me mandó a dar. Lo que quería era dejarme inválida y casi lo logra, casi quedo coja. Fue a punta de terapias y la fe en Dios que pude volver a caminar. 
 END: ¿Alguna vez quiso matar a Varela? 
YG: Sí. Cuando él mató a ese ser que yo amaba, lo odié tanto que quería matarlo. Yo me decía ‘le voy a pegar un tiro si me obliga a estar con él, de pronto le quito el arma y le disparo’. Pensaba muchas cosas, pero después me di cuenta de que la realidad era otra y decía ‘este señor es un Dios, lo sabe todo, puede matar gente cuando quiera’ y le tenía pánico.
 END: ¿Se sintió en peligro saliendo con un narco?
YG: Nunca conocí a Varela en su faceta de narcotraficante, afortundamente. Siempre decía que cuanto menos supiera, yo más vivía, y con tanta muerte que ha sucedido y cosas que he visto, creo que tenía toda la razón.
  END: ¿Qué le agradece a Varela?
YG: Le agradezco dos cosas que él hizo buenas en mi vida: Una, haberme evitado saber cosas de su trabajo, de sus rutas, nunca estuve en más de dos fiestas de sus amigos y prepagos. Y mi hijo, que fue lo único bueno que dejó en mí, esa semilla buena y por la cual hoy lucho.

END: ¿Usted  también fue prepago?
YG: Nadie puede decir jamás eso de Yovanna Guzmán.  Nunca he aparecido en un book de una peluquería, nunca he estado en los libros de las prepago. La gente piensa que porque fui la mujer de un narcotraficante, era prepago. No, la prepago es la que se acuesta una noche y su vida sigue  normal; la mujer fue lo que me tocó a mí, yo no lo pude dejar hasta que se murió, nunca pude hacer mi vida propia hasta que lo mataron.
 Yo creo que en medio de todo lo malo que me pasó con Varela, fue lo bueno que me pasó. Si no hubiera conocido a Varela, a lo mejor hubiera terminado como todas las actrices y modelos que están hoy en la televisión. Todas han sido prepagos, a todas les encanta tener billete, su buen carro y vivir bien. No nos digamos mentiras: eso no es un secreto para nadie.
 END: ¿Por qué se decidió a publicar un libro? YG: Decidí hacerlo para contar una verdad, para que mi hijo la entienda, para que sepa que su mamá no fue una prepago nunca; que de pronto cometió un error y que de los errores uno tiene que aprender.
 END: ¿Cuántos años tiene su hijo?
YG: Tiene ocho años.
 END: ¿Cómo ha asimilado su hijo su historia con Varela?
YG: Ha sido una etapa muy dura, creo que de ahí sale otro libro: las madres viudas de la mafia. Eso es lo más duro que me ha tocado; más que la convivencia con Varela, más que los tiros que me hayan dado, más que las muertes que haya vivido, ha sido explicarle a un ser cómo un padre puede hacer tantas cosas malas y cómo ese ser le dio la vida.
 END: ¿Varela fue un buen padre?
YG: Él llamaba a su hijo todo el tiempo, estaba pendiente de que nunca le faltara nada, dándole calor y cariño. Pero para mí no era el mejor padre, hubiera sido el mejor de haber dejado el narcotráfico; porque ese es el peor ejemplo que le puede dejar un papá a un hijo.
 END: ¿Alguna vez Varela pensó en entregarse?
YG: Cuando empecé mi romance con él, cuando estábamos en el mejor momento de nuestra vida de amor, de pasión, del idilio que vivimos, yo le decía que nos fuéramos del país a empezar una nueva vida. Él decía algo que yo creo que era muy cierto; él no era el simple narcotraficante, era el papá de los narcotraficantes. Y me decía: ‘Flaca, yo no me puedo salir de esto, este es el destino que escogí, a mí me toca morirme en mi ley; si me retiro esto se vuelve un caos’. De hecho, cuando él murió, empezaron muertes por un lado y muertes por otro; Varela de alguna forma imponía el orden, por eso nunca se salió.
 END: ¿Qué sintió cuando supo que Varela había muerto?
YG: Ese día me sentí libre, por fin podía iniciar una nueva vida. No le di gracias a Dios porque era el padre de mi hijo y porque de alguna forma sentía gratitud por él, pero sentí que por fin se me abrían las rejas.
 END: ¿Cómo ha sido llevar el estigma de Varela en su vida?
YG: Desde que supe que era Varela, empezó mi trauma y a darme látigo con ese estigma. Después de la muerte ha sido peor. Nunca había sido capaz de decirle a nadie y menos en los medios que mi marido era Varela. Las pocas personas que sabían era mi familia y tres o cuatro amigos de crianza, porque eso no era algo para sentirme orgullosa, para estar mostrándolo al mundo. Por el contrario, me daba vergüenza, porque mi mamá me crió de otra forma, no me crió para que fuera la mujer de un narcotraficante; ella me crió para que hubiera sido una abogada, una verraca como ella.
 END: ¿Ha tenido inconvenientes por publicar el libro?
YG: Después de que me convencen de sacar el libro y se destapa todo el rollo, se me vino todo el mundo encima. La relación que tenía con mi novio se dañó, simplemente porque salí a decir que iba a contar la historia.  Un mes antes de salir el libro al mercado sí tuve amenazas y tuve que durar varios días encerrada orando.
 END: ¿Por qué la amenazaban?
YG: El caso es que yo no iba a hablar de nadie, no me corresponde denunciar las mujeres de Varela, las que contrataba y les pagaba. No. Yo conozco muchas modelos y actrices, pero es que ese no es mi tema; tampoco sus rutas ni sus relaciones públicas, porque esa era la vida de él, su doble vida para mí y la que jamás conoci . Hoy la gente sabe que Yovanna Guzmán no está hablando de nadie, de hecho se cambiaron nombres, y yo lo que cuento en el libro es la parte sentimental y emocional que vivimos los dos.
 END: ¿Hoy es feliz?
YG: En este momento mi vida es normal, es feliz, en medio de todo. Porque como digo yo y muchos colombianos, vivimos pobres pero muy felices. No tengo dinero, pero tengo tranquilidad, libertad y el reto de criar un niño con diferentes pensamientos a los que tuvo su papá y sacarlo adelante en la vida como un hombre profesional.
"Todos los reinados se manejan con rosca"
 END: ¿Varela le compró algún reinado?
YG: El último. Después de haber estado en todos los reinados es cuando yo conozco a Varela y voy a Chica Med.  Desde el primer momento en que yo me fui a inscribir, él mandó su mano derecha y compraron el concurso.
 END: Usted también fue Señorita­ ­Tolima al Reinado de Belleza de ­Cartagena...
YG: Varela no quería que fuera, pero lo convencí .Le decía: ‘yo voy, pero no voy a perder; yo sé que esto se maneja con dinero, tú tienes los contactos, yo quiero que me entres en el grupo de las cinco finalistas y yo me encargo de llegar al primero o al quinto puesto’. Ese era el trato nuestro y cuando vimos que no pude ir a Cartagena porque no me aceptaron por haber participado en Miss Mundo Colombia, fue entonces cuando vino el concurso de Chica Med.
 END: ¿Pagaron para poder ser Señorita Tolima?
YG: No. A mí me eligieron por decreto y no porque pagara. Simplemente mi amigo Maximiliano, que era uno de los diseñadores grandes del Tolima, habló y buscó el decreto. Pero había muchas señoras de la Gobernación que no estaban de acuerdo, yo cogí el decreto y me fui calladita a trabajar en mi preparación con Barraza y María Mónica­ Urbina, con los grandes. Creo que a esas señoras de la rosca no les gustó eso, que no les rindiera pleitesía y comenzaron a hacerme la vida imposible. De hecho, con Maximiliano hablamos en algún momento que de allá vino el chisme para que Raymundo (Angulo) no me aceptara en Cartagena porque había participado en Mis Mundo Colombia en 1998.
 END: ¿Qué opina hoy de los concursos de belleza?
YG: A todos los reinados que yo fui me di cuenta de que se manejan con rosca; no puedo decir ‘este no, este si’ el de verdad que la reina gana por mérito propio; mentira, no nos engañemos.
 END: ¿No le molesta que le hagan el feo por lo que dice?
YG: Mi futuro no está enfocado en el medio del modelaje y la farándula. Me tiene sin cuidado que me hagan el feo, eso ya no me interesa. Antes me hubiera afectado, pero en este momento de mi vida tengo tanta paz y tranquilidad, que me conozco a mí misma y no me importa decir la verdad. Debemos ser sensatos en la vida, ¡cuáles reinados que promocionan el turismo o que hacen realidad los sueños de unas niñas! Lo que promocionan son las arcas de los que los hacen.
 END: ¿Qué espera de la gente que compre su libro?
YG: Más que compren el libro porque me gane yo un peso, porque la gente piensa que estoy ganando mucho dinero, pero no, yo me estoy ganando el 10 por ciento; lo que busco es que la gente tome la historia como la estoy mostrando, que se sensibilice de que esas cosas pasan y que le muestre a las niñas y niños que esto no debe seguir pasando.

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