En La Calle Real, muestra histórica que merece respeto
Dentro de la exposición está el de la obra Los Colonizadores de Manizales; Los Comuneros, Caballero y Góngora ubicados en el cañón del Chicamocha, entre otros.
Es una muestra que estuvo en Manizales durante dos años y medio y que en Armenia estará hasta diciembre. Vallejo, es un artista que genera polémica, es así como en la carrera 21 con calle 14, entre el edificio de la Dian y la catedral La Inmaculada Concepción, está iniciando la exposición Caballero y Góngora, ubicación que tiene un tinte crítico, al igual que todas las que están ubicadas en el sector de la plaza Bolívar.
Caballero y Góngora fue conocido en la historia colombiana como el arzobispo-virrey, este hizo arrodillar el movimiento comunero que se extendió hasta al Socorro, San Gil, Charalá, Girón, y otros. La rebelión se organizó en el Socorro con participación de mestizos, criollos e indios que se dirigieron hacia la capital para pedir la derogación de los nuevos impuestos, para detener a los comuneros el arzobispo aconsejó a los oidores aceptar todas las demandas, por lo que se procedió a jurar el acuerdo ante los evangelios.
Tras esto, ofició una misa solemne y los comuneros volvieron a sus pueblos convencidos de que la autoridad del arzobispo respondería del acuerdo. No fue así, pues, una vez en Bogotá, los oidores y Caballero declararon nulo lo acordado por haber sido arrancado con coacción.
Como la anterior, hay una historia detrás de cada una de las figuras, en el mismo sector está la del Esclavo, la India, Manuela Beltrán, José Antonio Galán —en el aire—, fray Ciriaco de Arcila y cerrando este punto frente a la asamblea La vergüenza. “Esta es una composición que considero es la más importante y que debe de estar en todas las plazas Bolívar del país”, indicó el maestro Vallejo.
Ya más a adelante sobre la carrera 14 con calle 18 se recrea la historia de la región con los moldes de los colonizadores. Al comienzo se visualiza La mula, después sigue La duda, Lanza corazones, El arriero y La mula, La entrega.
La muestra continúa en el parque Sucre con El niño y la mula y en una esquina el Buey volador que se dirige hacia las instalaciones de Teatro Azul, donde cierra la muestra con La mula trucha, Niño índigo, El tamborilero, La rebelión y El grito.
Es una muestra que estuvo en Manizales durante dos años y medio y que en Armenia estará hasta diciembre. Vallejo, es un artista que genera polémica, es así como en la carrera 21 con calle 14, entre el edificio de la Dian y la catedral La Inmaculada Concepción, está iniciando la exposición Caballero y Góngora, ubicación que tiene un tinte crítico, al igual que todas las que están ubicadas en el sector de la plaza Bolívar.
Caballero y Góngora fue conocido en la historia colombiana como el arzobispo-virrey, este hizo arrodillar el movimiento comunero que se extendió hasta al Socorro, San Gil, Charalá, Girón, y otros. La rebelión se organizó en el Socorro con participación de mestizos, criollos e indios que se dirigieron hacia la capital para pedir la derogación de los nuevos impuestos, para detener a los comuneros el arzobispo aconsejó a los oidores aceptar todas las demandas, por lo que se procedió a jurar el acuerdo ante los evangelios.
Tras esto, ofició una misa solemne y los comuneros volvieron a sus pueblos convencidos de que la autoridad del arzobispo respondería del acuerdo. No fue así, pues, una vez en Bogotá, los oidores y Caballero declararon nulo lo acordado por haber sido arrancado con coacción.
Como la anterior, hay una historia detrás de cada una de las figuras, en el mismo sector está la del Esclavo, la India, Manuela Beltrán, José Antonio Galán —en el aire—, fray Ciriaco de Arcila y cerrando este punto frente a la asamblea La vergüenza. “Esta es una composición que considero es la más importante y que debe de estar en todas las plazas Bolívar del país”, indicó el maestro Vallejo.
Ya más a adelante sobre la carrera 14 con calle 18 se recrea la historia de la región con los moldes de los colonizadores. Al comienzo se visualiza La mula, después sigue La duda, Lanza corazones, El arriero y La mula, La entrega.
La muestra continúa en el parque Sucre con El niño y la mula y en una esquina el Buey volador que se dirige hacia las instalaciones de Teatro Azul, donde cierra la muestra con La mula trucha, Niño índigo, El tamborilero, La rebelión y El grito.
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